¡Toma yaaaa! ¡Que viva la sombra verde, sí señor! Y ahora no me vengáis diciendo que no lleva el color de las moscardas gordas esas verdes asquerosas… ¡puaj! Qué mal le queda por dios.
¿Y qué le ha pasado en el pelo? ¿Se ha peleado con una manada de leones o qué? ¡Que viva el cardado!
Aunque vamos a fijarnos: analizando bien ese gesto de boba que lleva en la cara, los ojos que no se le sostienen abiertos y semejante pinta me da a mí que esta o viene de echar un partido de pelotas con el Beckham y lleva el peinado así por las refriegas (digámoslo de esa forma sutil porque esta es una página abierta a todas las edades) o se hartado de vino. No me parece normal llevar esas pintas nada más salir de casa.
¿Qué pensáis que le ha podido pasar a Rebecca Loos? ¿Alguna otra opción aparte de las citadas?